Noticia: Acuicultura es opción para mypes

Acuicultura es opción para mypes


Eusebio Taco era ganadero de una comunidad puneña llamada Lagunillas cuando, hace ya 10 años, el aumento del nivel del agua comenzó a inundar sus pastizales y se vio en la necesidad de cambiar de ocupación. Escuchó entonces que Fondepes tenía un programa para desarrollar una actividad complementaria llamada acuicultura y que consistía en cultivar o criar especies acuáticas de manera tecnificada.
Taco, que es presidente de la Asociación de Acuicultores de Trucha de Lagunillas, recuerda que en 1997 la tecnología se transfirió a seis comunidades y que comenzaron con 12 jaulas flotantes. Luego de ver los buenos resultados, cada vez más ganaderos de la zona decidieron invertir su dinero en esto. "También nuestros músicos y profesores comenzaron a invertir y ahora somos una zona truchícola", añade. Para el 2000, ya había tres microempresas privadas en la región y el año pasado sus 60 asociados (entre pequeñas empresas y asociaciones) produjeron cerca de 550 toneladas métricas.
Pero claro, es más fácil narrarlo que hacerlo. Según Fondepes, uno de los mayores problemas de los productores es la descapitalización. Por ejemplo, si uno quiere comenzar a producir 10 toneladas métricas de truchas al año podría requerir una inversión de US$20.000. La falla de algunos productores es no prever el alto costo del alimento balanceado y postergar la compra hasta el último minuto. Otras dificultades se presentan cuando el centro de cultivo está lejos de su destino de comercio y esto aumenta el costo del flete. O cuando el productor quiere crecer, pero solo se abastece de un pequeño riachuelo. Para ello, el productor debe analizar la disponibilidad del espacio, del capital, del agua y la demanda del producto.
ALTA DEMANDA¿Pero qué opciones tienen las mypes para desenvolverse en este rubro? Cofide, entidad que desarrolla el soporte de proyectos, evalúa procesos del sector acuícola de los que ya tiene aprobadas dos operaciones: el financiamiento de camarones gigantes de Malasia en Satipo (Junín) y el de las conchas de abanico en Samanco (Áncash).
En el caso de Samanco, se ha aprovechado las concesiones autorizadas a un grupo de productores y se proyecta tener resultados en nueve meses. La inversión será de US$600.000 y será financiada en cuatro años. De acuerdo con Álex Abad, ejecutivo del área de desarrollo de Cofide, el objetivo es generar desarrollo en lugares donde no está llegando el sistema financiero. Lo interesante es que Cofide le echa el ojo a la acuicultura porque se trata de procesos productivos rentables.
"Antes no eran rentables porque las tasas de interés eran más altas, porque no había tecnología aplicable en la zona y por un tema de mercado", explica Abad. Añade que la oportunidad existe porque "la demanda de camarones en el ámbito nacional está insatisfecha e incluso hay veda de pesca de camarones". Cofide evalúa otras oportunidades como la trucha en Junín y Puno; el paiche en Ucayali y Loreto; la tilapia en Piura y San Martín.
LA TRUCHA NO BASTAEl potencial de especies para criar de manera tecnificada en el Perú es enorme, sin embargo muchas requieren un desarrollo tecnológico que aún no existe en el país. De acuerdo con el Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP), la crianza y engorde del paiche en la selva es una realidad, pero todavía no se cuenta con la tecnología para reproducirlo en cautiverio, por lo que hay estaciones en las que es más difícil conseguir los alevinos (larvas).
Por ejemplo, Luis Echevarría empezó a cultivar comercialmente un pez tropical llamado paco cuando se murieron sus plantaciones de tangelo en Satipo (Junín). Como tiene a la mano la tecnología necesaria, en tres años ha construido 15 pozos para la crianza de paco, gamitana y tilapia. Por el momento busca satisfacer al mercado local porque de diciembre a abril hay escasez de doncella, un pescado que se consume en los restaurantes turísticos. Sin embargo, el problema con el paco son sus espinas, un desalentador natural para cualquier importador.
Salvador Tello, director de ecosistemas acuáticos del IIAP, comenta que muchas comunidades de la Amazonía "han adoptado con eficiencia la tecnología para el autosostenimiento y que en muchos casos, han aprovechado este conocimiento para producir comercialmente".
Por ejemplo, David Vela apostó por la gamitana y hace seis años inició su empresa L&D Mega Inversiones en Iquitos. Trabajó lentamente porque no era sujeto de crédito y tuvo que usar recursos propios para hacer 5 pozas de 4,25 hectáreas. Sin embargo, el año pasado obtuvo un crédito de S/.22.000 para la compra de alevinos y alimentos balanceados. Vela, que comercializó 35 toneladas el año pasado, asegura que solo en Iquitos hay una demanda insatisfecha de 5.000 toneladas métricas pero que no hay una red de comercialización para llegar a todo ese mercado.
EXTENDER LA REDSi bien las especies estrellas para la exportación son las conchas de abanico, los langostinos y las truchas, ¿qué oportunidades tienen los microproductores de aprovechar primero la demanda nacional?
Según Produce, el cultivo de las especies en el ámbito marítimo se dirige generalmente a la exportación, pero esto no significa que no haya acuicultores de pequeña escala que busquen oportunidades en el mercado local.
Para el ingeniero pesquero William Rivera, gerente de Aquimar, una pequeña empresa que cultiva la concha de abanico en Casma (Áncash), "esto no es hacer pan. Para vender pan es mucho más difícil". Lo dice porque cuando se acercó inicialmente a pedir un préstamo las entidades financieras no le dijeron "ni hola". "Me inicié con préstamos personales porque en acuicultura no me querían prestar, pero hice historial y ahora para seguir creciendo he obtenido un préstamo de S/.42.000 en un banco y de S/.58.000 en una caja de ahorros.
¿Y cuál es su mercado? Además de proveer a productores más grandes, le vende a los intermediarios directos de los restaurantes gourmets de Lima. "Prefiero no llevar mis productos a los terminales pesqueros porque te dan un precio muy bajo". Actualmente Aquimar produce 18.000 kilos de concha de abanico y proyecta cerrar este año con 30.000. Rivera dice que para crecer es muy importante tener una asociación que busque mercados y defienda intereses comunes. "Hay mucho pirata en el mar y por eso sería bueno tener una guardianía especializada que vigile los cultivos de los asociados", señala.
A diferencia de Rivera, Eusebio Taco dice que no soñaba con ser acuicultor a pesar de tener toda esa agua alrededor. Acepta que otros vecinos han aprovechado mejor que él las capacitaciones que les dieron. Dice que otros han avanzado más rápido y se han hecho autosostenibles como es el caso de un grupo de hermanos que eran músicos y que ahora tienen una pequeña empresa con un gran nombre: Decisión.
LAS CLAVES4La demanda por alimentos en el mundo crece a un ritmo de 1,8% anual y la actividad pesquera extractiva está llegando a niveles máximos de explotación. La producción acuícola nacional crece a un ritmo promedio del 15% anual (Produce).4La región amazónica consume 50 kilos de pescado per cápita al año (IIAP). 4El cultivo de las especies en el mar es mayormente destinado a la exportación y el de las áreas continentales se destina más al consumo